
No siempre nos gusta todo lo relacionado con nuestra vida, pero en el fondo tenemos que apreciar lo que tenemos y luchar por lo que queremos. Una parte de nosotros cree que todo es posible. Por eso, cada mañana es una oportunidad nueva para conseguir lo que queremos.
Sin embargo, no siempre tenemos todas los posibilidades al alcance de nuestras manos, incluso cuando están, hay veces que no sabemos utilizarlas. El problema es que elegimos creer lo contrario. Elegimos creer que somos incapaces de vivir nuestra vida como queremos vivirla, sin exprimir todo nuestro potencial. Elegimos aceptar nuestra realidad como otros nos han dicho que debe ser.
Sin embargo, tenemos una opción. No tenemos por qué ser complacientes y conformarnos. Podemos agitar las cosas y vivir de acuerdo a otras normas.
Aquí están 9 Cosas que debes recordar al despertar cada mañana.
1. Hoy puede ser un gran día, pero sólo si lo vivo bien.
¿Por qué a menudo nos sentimos tan impotentes? Porque nos convencemos de que las cosas son como son y no se pueden cambiar. Esperamos que las cosas surjan solas. Pero en la vida, la verdad es que si quieres algo, tienes que luchar por conseguirlo. Tienes que trabajar para lograrlo.
Que hoy pueda ser un gran día no depende de las condiciones meteorológicas, ni de tu estado de ánimo (que también está bajo tu control), ni de nadie más. Si quieres tener un día agradable y productivo opta por tenerlo. Sólo depende de tu percepción y de lo que quieras creer y hacer.
2. Hay muchas cosas que no puedes controlar, pero hay muchas cosas que sí puedes controlar.
Hay muchas cosas en la vida que están fuera de nuestro control, pero no dejes que esto te haga pensar que en la vida todo está fuera de tu control. La realidad es que la vida que estás viviendo es casi en su totalidad tu propio diseño. En el camino has tomado muchas decisiones que te han llevado al lugar en el que te encuentras.
Decir que tu vida está fuera de tu control es simplemente lo que otras personas quieren que creas porque les resulta más fácil conseguir que hagas lo que ellos quieren que hagas. Y en ocasiones es lo que tú mismo quieres creer porque es más fácil asumir una mala situación que ser consciente de que tienes que trabajar muy duro para salir de esa mala situación.
3. No necesitas la aprobación de nadie.
La necesidad de aprobación es como una adicción. Si tomas tus decisiones basándote en la aprobación de los demás, al final, nunca haces lo que te gustaría hacer y acabas sacrificando tu propia felicidad.
No pongas la llave de tu felicidad en el bolsillo de nadie más. Aprende a decir «no» a las personas y las obligaciones que no añaden valor a tu vida. Tu tiempo es un recurso muy valioso y no conviene gastarlo con quien no merece la pena.»No esperes que nadie te dé permiso para vivir.»
4. Quejarse es inútil a menos que puedas sugerir una solución.
No hay que ser un quejica constantemente. Eso no te ayuda y sin duda tampoco ayuda a tus relaciones. Si no te gusta tu situación actual, trabaja para cambiarla, pero no te quedes de brazos cruzados quejándote. Quejarte todo el tiempo solo hará que gente cercana a ti no quiera estar cerca de ti.
Sé positivo y mira el lado bueno de las cosas. Y si encuentras un problema que debe ser abordado, céntrate en la solución en lugar de quejarte. La conclusión es que nunca vas a llegar a donde quieres si estás quejándote todo el tiempo.
5. El hecho de que no te hayas dado por vencido, es un éxito en sí mismo.
Muchas personas se dan por vencidas a la primera de cambio, pero tú no. No, tú te despiertas todos los días y haces las cosas que tienes que hacer. Luchas contra la corriente y te niegas a darte por vencido. Te niegas a aceptar la mediocridad. Te niegas a escuchar a los demás cuando te dicen que no eres lo suficientemente bueno. Todavía estás en ello, planeando una buena batalla.
6. No vale la pena preocuparse por la gente tóxica.
A veces permitimos a la gente equivocada ocupar demasiado espacio en nuestras cabezas y en nuestros corazones. Nos reunimos con gente que nos roba la energía, sobre todo cuando vivimos en una gran ciudad o trabajamos en un entorno competitivo grande.
Estos individuos tratarán de influir en ti y convertirse en una parte de tu vida porque encuentran su propia vida vacía. Ya envenenaron sus propias vidas y ahora están buscando envenenar la tuya. No dejes que lo consigan.
7. Céntrate en lo real.
Mientras que la tecnología moderna cambia la vida de muchas maneras beneficiosas, hay un aspecto de esta tecnología que interfiere considerablemente con nuestras vidas y relaciones. No seas tan adicto a una pantalla, ya sea de ordenador o de teléfono, que te pierdas la oportunidad de disfrutar la vida real que se desarrolla en frente de ti.
Aprende a desconectar. Dale a la gente tu atención completa. No busques la estimulación sin sentido en una pantalla sin alguna razón, y vuelve a centrarte en fomentar las conexiones humanas reales.
8. Las cosas buenas en la vida terminan demasiado pronto cuando no se aprecian.
Nuestras mentes tienden a considerar la posibilidad de que la hierba al otro lado es más verde. Pero tenemos que recordarnos conscientemente a nosotros mismos que la vida no se trata de actualizar constantemente las cosas. Para vivir una vida feliz y plena tenemos que aprender a apreciar y amar lo que tenemos. No esperes a que las cosas terminen antes de que las empieces a apreciar.
9. Cada día es una bendición.
Piensa en cuántas personas mueren cada minuto de cada día y empieza a darte cuenta de que el despertar cada mañana es una bendición. Vivimos en un mundo cargado de episodios de caos. Además de esto, los accidentes ocurren y la gente muere a causa de ellos. Conseguir un día más para respirar, para experimentar la vida, y para hacer algo significativo, es el regalo más grande que uno puede recibir. Haz que cada día cuente.