
Bill Gates a menudo se refiere a su relación permanente con Warren Buffett como mentor, y Mark Zuckerberg contó a Steve Jobs como mentor clave.
Construir un negocio no es ciencia de cohetes, por lo que no hay una fórmula para el éxito mágico. Algunas personas piensan que necesitan obtener un MBA para hacerlo bien, mientras que otros están convencidos de que aquellos que abandonan la escuela temprano como (Bill Gates, Mark Zuckerberg) tienen la ventaja.
En la realidad, el mejor enfoque en estos días puede ser encontrar y usar un buen mentor.
Por supuesto, la mentoría no es nueva – ha sido la forma preferida de aprender artes y manualidades desde el camino de vuelta en la Edad Media. Y ciertamente creo que dirigir un nuevo negocio es más un arte que una ciencia.
En el libro, One Minute Mentoring, por el legendario consultor de negocios Ken Blanchard, en compañía de Claire Díaz-Ortiz. Ellos detallan los pasos de acción clave requeridos, incluyendo los siguientes:
1. Acordar los objetivos y la visión desde el principio (Misión)
Una relación mentor / aprendiz debe ser una experiencia de ganar-ganar y de aprendizaje para ambos. Al igual que cualquier acuerdo de socio, minimiza malentendidos para tener objetivos anotados temprano.
2. Establece un horario regular y forma de compartir (Compromiso)
Determina el tipo de compromiso que funciona mejor para sus personalidades y otros compromisos.
Las buenas asociaciones de mentores requieren tanto la flexibilidad para participar en la comunicación digital como el poder de las reuniones en persona cuando sea posible. Las reuniones pueden ser informales o estructuradas.
3. Expande tu red en ambos lados (Redes)
Un valor clave de la mentoría es tener acceso a las redes de los demás, que pueden ser nuevos socios comerciales o nuevos mentores.
El verdadero liderazgo empresarial es más sobre las relaciones y saber quién sabe, en lugar de conocer personalmente todas las respuestas. Los medios sociales compartidos son la nueva red.
4. Construye y mantén una relación de confianza de pareja (confianza)
Construir confianza lleva tiempo, pero puede destruirse en un instante. Comienza siempre diciendo la verdad, permaneciendo conectado, y siendo confiable.
Un buen mentor no siempre te dirá lo que quieres oír, sino lo que necesitas oír, pero siempre con cortesía y respeto.
5. Crea oportunidades para que tu mente crezca (Oportunidad)
Como socio de mentoría, tendrás acceso a oportunidades personales y de negocios que simplemente no están disponibles para los no mentores y los no aprendices.
Estas oportunidades pueden ser intergeneracionales, que es una excelente manera de intercambiar y comparar el tiempo probado, así como nuevos conocimientos.
6. Revisa regularmente el progreso y ajusta el enfoque (Revisión y Renovación)
Nunca llegarás a donde quieres ir si no tienes una hoja de ruta, y nunca sabrás si has llegado si no tomas puntos de control.
En estos días, la flexibilidad y la agilidad para satisfacer los nuevos requerimientos de los clientes es la clave del éxito. Practica cómo hacer esto con tu mentor.
La mayoría de la gente no se da cuenta de que incluso las personas más exitosas en los negocios se han beneficiado de los mentores, y no tratar de esquivar o ocultar estas relaciones.
Bill Gates a menudo se refiere a su relación permanente con Warren Buffett como mentor, y Mark Zuckerberg contó a Steve Jobs como mentor clave. Me pregunto quiénes son los afortunados que ahora consideran a Gates o Zuckerberg como su mentor.
Algunas personas me preguntan sobre la diferencia entre un entrenador y un mentor. En mi opinión, los entrenadores se centran en sacar lo mejor de las habilidades genéricas de un individuo, mientras que un mentor añade el elemento de compartir información sobre la industria, empresa o unidad de negocio que el mentor cree que es relevante para el aprendiz.
Los buenos mentores también deben ser modelos a seguir y abogados para el aprendiz.
Si todos estos puntos ya están claros para ti, entonces es probablemente el momento de pasar del rol de mentorado al papel de mentor para otra persona. Aquellos que extienden una mano amiga a otros siempre tienen mucho que ganar, en los negocios, así como su propia satisfacción personal.
En palabras de un antiguo proverbio budista: «Si enciendes una lámpara para alguien, también iluminará tu propio camino».